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Compromiso con la naturaleza en el cultivo de uvas de mesa

RAIMSA Grapes es una empresa comprometida con la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente. En su filosofía de trabajo, prima el respeto a los recursos naturales que sostienen y hacen productivas y rentables sus fincas. Realizan estudios científicos sobre el carácter de las tierras para analizar los componentes del paisaje y determinar si las prácticas de cultivo son adecuadas o si es necesario realizar correcciones para mejorar el paisaje, conservar el hábitat y proteger la fauna y la flora de la zona.

Cadena de Valor

RAIMSA persigue constantemente mejorar la calidad de sus productos para dar satisfacción a sus clientes y a los consumidores finales. Para ellos llevamos a cabo una apuesta constante por la investigación en nuevas variedades, siempre a partir de cruces naturales y sin la intervención de la ingeniería genética.

La explotación de nuestras parcelas se realiza desde estrictos criterios de sostenibilidad ambiental y un riguroso respeto hacia los recursos naturales. Las nuevas variedades se someten a un largo proceso de adaptación a las peculiares condiciones climáticas del Valle de las Uvas y las características de la tierra, hasta alcanzar una seguridad y calidad que las hacen óptimas para el consumo.

Sostenibilidad con la mirada puesta en 2030

RAIMSA conoce y respeta los Objetivos de Desarrollo Sostenible determinados por la ONU en su Agenda 2030, que comprenden la implementación de políticas para un uso racional y eficiente del agua y la optimización de su uso para riego.

También llevamos a cabo iniciativas relacionadas con la energía asequible y no contaminante, que incluyen la implantación de sistemas de energía renovable y la vigilancia para un consumo energético responsable.

El respeto a la tierra constituye otro de nuestros objetivos, una producción ecológica que respeta la biodiversidad y evita el uso de productos pesticidas para el combate contra las plagas, así como el uso de materiales reutilizables para la confección del packaging.

Finalmente, un aspecto importante de nuestra misión y valores lo constituye la creación de puestos de trabajo dignos, con el máximo respeto a los derechos y las condiciones laborales de las trabajadoras y los trabajadores.

Cada gota de agua es oro líquido

El agua es un bien muy escaso y valioso, hasta el punto de que se afirma con razón que se puede considerar como el “petróleo del siglo XXI”, no en vano desde 2020 cotiza como producto en el mercado de futuros.

Efectivamente, el crecimiento constante de la población y la crisis climática, con elevadas temperaturas y largos periodos de sequía, están teniendo como consecuencia que muchas zonas de nuestro planeta estén sufriendo estrés hídrico.

En RAIMSA somos conscientes de que el agua es un recurso precioso y por ello utilizamos las técnicas de irrigación más modernas, por lo que todas nuestras parcelas están dotadas de sofisticados sistemas de riego por goteo.

Asimismo, llevamos a cabo rigurosos y constantes controles de la calidad y cantidad de agua que se destina a cada parcela según sus características, mediante la atención diaria a las previsiones meteorológicas y la presencia de sensores que determinan sus necesidades.

Amamos la tierra, respetamos la naturaleza

Cultivar nuestras variedades de uva de mesa en el Valle de las Uvas, en el corazón de la provincia de Alicante, es un privilegio al que hacemos honor cada día desarrollando una filosofía de trabajo en la que prima el respeto a los recursos naturales que sostienen y hacen productivas y rentables a nuestras fincas.

Todo se lleva a cabo con el más absoluto respeto al medio ambiente: el trabajo y la protección de la tierra, el cuidado de los frutos y la lucha contra las plagas, la racionalización del consumo de agua, la gestión de los residuos o el transporte de las mercancías, la presentación de nuestros productos.

Recientemente hemos llevado a cabo un estudio científico sobre el carácter de las tierras que componen tanto nuestras parcelas como los alrededores, para analizar los componentes que forman el paisaje y determinar con mayor exactitud si las prácticas de cultivo que realizamos con las adecuados o si fuera necesario realizar correcciones, todo ello con el fin último de mejorar el paisaje, conservar el hábitat y proteger la fauna y la flora de la zona.

Somos ecologistas porque nos va la vocación y la vida en ello.